¿Cuál es el legado de GABRIEL GARCÍA MARQUEZ? ¿obras pasajeras
de piedra y cemento? No. Su obra es mucho más grande, más universal y más
eterna. Yo le llamo a su legado, a sus maravillosos libros y cuentos "LA UNIVERSIDAD". Un alma matter
tan inmensa como el firmamento, pero con una curiosidad,
un solo maestro: EL NOBEL, EL HIJO DEL TELEGRAFISTA DE ARACATACA.
Esta academia tiene un núcleo temático que merece una mención aparte, el cual es su módulo más completo, más difícil, más mágico, más real, más costeña, más cosmopolita: CIEN AÑOS DE SOLEDAD, libro traducido en numerosos idiomas, ejemplar estudiado por los ciudadanos de todos los continentes, requisito indispensable para los gobernantes de cualquier nación, el presidente Obama con ocasión de su muerte manifestó, cito textualmente: "era uno de mis favoritos desde joven y tuve el placer de conocerlo”.
Esta academia tiene un núcleo temático que merece una mención aparte, el cual es su módulo más completo, más difícil, más mágico, más real, más costeña, más cosmopolita: CIEN AÑOS DE SOLEDAD, libro traducido en numerosos idiomas, ejemplar estudiado por los ciudadanos de todos los continentes, requisito indispensable para los gobernantes de cualquier nación, el presidente Obama con ocasión de su muerte manifestó, cito textualmente: "era uno de mis favoritos desde joven y tuve el placer de conocerlo”.
Observen que utilizo la palabra "estudiado" y no
"leído"; ya que para
interpretar la obra magna del maestro debe ser repasada al menos 10 veces para
su profundo razonamiento.
¿Cuántos colombianos hemos leído por lo menos por una vez
Cien Años de Soledad? muy pocos.
¿Cuántos colombianos hemos estudiado la obra de Cien Años de
Soledad? el número se reduce aún más. Qué tristeza.
Si los colombianos profundizáramos sobre cien años de soledad y aplicáramos sus principios de igualdad y equidad como lo hizo el señor Buendía al fundar Macondo tratando de que a todas las casas del pueblo les diera el sol por igual, no nos acostaríamos y levantaríamos con la nefasta certeza de que hay muchos abuelos que no tienen un techo donde dormir y niños que no tienen comida para desayunar.
Este es el legado de nuestro nobel, algo sencillo: sus “letras”, pero que llevan intrínsecamente de la manera más armoniosa e ingeniosa posible preceptos y principios que tienen un valor incalculable. Letras que personas y gobernantes de otros países han puesto en práctica y hoy tienen un mejor porvenir que el nuestro, porque aquí en Colombia además de no leerlo, algunos queman sus libros y otros le desean el infierno.
Así que los invito a que leamos los libros de GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ para que nuestro presente y futuro no siga girando en medio de la ignominia y la historia desdichada no se siga repitiendo una y otra vez como decía la vieja sabia de Úrsula Iguarán en CIEN AÑOS DE SOLEDAD.
Yamith Torres Avilez
Docente Institución Educativa San José
Docente Institución Educativa San José